VILLATORO, MANUEL P.
1 de septiembre de 1939, son las cuatro de la madrugada y los guardias del puesto fronterizo polaco están nerviosos. Los rumores sobre elaumento de soldados alemanes en la frontera son cada vez son másnumerosos. No saben que el mayor conflicto bélico de la historia estáa punto de estallar y que todo va a empezar con la invasión de supatria.
La invasión alemana de Polonia ha sidoconsiderada el detonante de la Segunda Guerra Mundial. Fue anunciadapor Adolf Hitler en un discurso, días antes del inicio de la guerra,en el que dejaba claros sus propósitos: «Aniquilación de Polonia enprimer término [à] No tengáis piedad. Actuad con brutalidad».
La nación polaca se encontraba en una difícilsituación: sus tropas nos estaban bien ubicadas; sus aliados franceses y británicos no parecían muy dispuestos a ayudarles; la tecnología de los tanques alemanes y la «Guerra Relámpago» superaban ampliamente asu obsoleta caballería, y la entrada en escena de la Unión Soviética,que también tenía grandes intereses en controlar Polonia, terminó pordesequilibrar el conflicto. En poco menos de un me